martes, 20 de marzo de 2018

Nos vemos pronto

No me gustan las despedidas, decir ‘’Adiós’’ en estas circunstancias significa que no vas a regresar y no te volveré a ver. Quizás no  vayas a leer esto jamás y eso me tranquiliza porque no quisiera que supieras los sentimientos que tengo hacia ti, quiero que tengas esa imagen que yo misma he construido para ti, de esa chica alegre que sin importar nada tiene una sonrisa en el rostro.

Me gustaría empezar confesándote como mi vida se había vuelto pedazos cuando tu llegaste  y como te volviste ese ángel que era el centro de mi mundo(Aunque no lo creas) Hubiese querido mil veces quedarme observando tus ojos café claro por el resto de la eternidad y esa sonrisa que tú solamente sabias colocar. Habría dado todo por permanecer cerca de ti y que tú también aceptaras ese cariño que solo tengo para darte.

Recordar ese día que te vi por vez primera es simple, tenías una camisa purpura que hacía que tus ojos se vieran más claros, el color castaño de tu cabello hacia un contraste único con esa piel nívea que te caracterizaba, no había otra cosa que yo no hubiese querido mirar jamás, desde ese día que quizás recuerdes, ese primero de octubre de ese año que tal vez no quiera recordar caí en tu encanto y te aseguro que será muy difícil para mí regresar a la realidad ¡Por no decir imposible! Solamente sueño con la idea de que un día nos volvamos a ver y pueda yo estar a tu lado, hasta que lo único que sea capaz de separarnos sea la muerte y si es posible, te esperaría después de ella para vivir toda la eternidad contigo.

Amor mío siempre fuiste tú, eres el primer pensamiento que tengo al despertar y el ultimo cuando me voy a dormir, veo entre las personas y no hay nadie que iguale ese rostro angelical que solo tú tienes, siempre fui ingobernable hasta que llegaste tú mi amado conquistador, eres eso que siempre soñé y ese ángel que siempre rogué para mí, explícame por favor ¿Por qué he de olvidarte?

Solo Dios sabe de mis charlas con la luna y las veces que he pedido por tu seguridad, la idea de perderte me atormenta y quisiera que no te apartaras de mí… Pero por desgracia he de escuchar que te vas pronto y tengo miedo, ya no volveré a verte a menos que tú regreses a mis sueños como lo has venido haciendo ¿Tenias alguna idea de lo que me hiciste?

Ojala un día me escuches y entiendas que siempre has sido y serás tú, no importa cuánto tiempo pase y donde estés te aseguro que te esperare con el mismo sentimiento vivo como lo estoy sintiendo ahora, tengo la esperanza de haber causado la misma impresión en ti y que por lo menos ahora entiendes lo que digo y como me siento.

Te deseo el mayor éxito del mundo y que puedas lograr todo lo que un día has soñado ¿Sabes algo? Me entusiasma la idea de que eres un joven fuerte y dotado de sueños, veo en ti la capacidad de hacer algo grande y espero que lo hagas ¿Por qué te digo esto? Algún día, quizás no hoy ni mucho menos en una semana, tal vez en cinco o siete años, ese algo grande te traerá de nuevo hacia mi o a mí me va llevar hacia donde estás tú, no sé por qué pero lo siento ¿No crees tú que cuando dos personas están destinadas a estar juntas el destino hace que ellas se encuentren?

Imaginarlo me resulta increíble, un reencuentro donde si el destino no nos separe, quizás tú con una mejor actitud hacia la vida y yo con menos miedo, tal vez eso era lo que me frenaba, mi miedo irremediable a que me rechazaras y me olvidaras ¿Qué podría hacer?


Lo último que quisiera hacer es olvidarte y me temo que lo he intentado, sin ningún tipo de éxito ¿Cómo lo hiciste? Ni yo misma logro explicar la forma en la que te has incrustado en mi alma, eres el héroe de mis historias, mi valiente guerrero y mi príncipe a quien siempre he de mencionar, ese ángel a quien siempre describo, quiero que quedes inmortalizado y así cada vez que te busque pueda encontrarte acá, vivo y solo para mí en una posibilidad pequeña en la que no me has olvidado ¡Quiero creer que no me olvidaras! ¡No me pienso despedir, algún día vas a regresar!

Quiero pensar que nunca leerás esto, pero si lo haces, nos vemos pronto.

viernes, 2 de marzo de 2018

Calle tres de mayo


Quizás este desorientada, estoy buscando algo que creo que deje en alguna parte ¿Me ayudas?

Lo único curioso que me pasa por la mente es como llegue hasta este punto, tengo matices de recuerdos pero en realidad no sé dónde estoy ni quien soy, solamente veo tus ojos color avellana y esa extraña particularidad tuya de aparecer en todos mis sueños ¿Quién eres? ¿Por qué solo te recuerdo a ti? La verdad estoy llena de ansiedad y me siento perdida, camino buscando tu rostro y no lo encuentro, sinceramente no sé qué busco ni que hago, ni mucho menos recuerdo mi nombre.

No sé qué contar porque no tengo historia (Si, aunque no lo creas) solo recuerdo haberme despertado justo allí donde termina la calle tres de mayo a las diez de mañana un primero de octubre, vi como dos gatos se acurrucaban cerca de mí para esconderse del sol que estaba bastante incandescente, posiblemente reviví no lo sé o quizás volví a nacer.

Vago buscando completar ese nombre que pasa por mi cabeza desde el momento en que regrese a la vida, solo una C vino a mi cabeza y unos ojos color avellana ¿Qué estoy buscando? ¿Seré yo misma?
Una letra sin ningún tipo de importancia para nadie es mi incógnita diaria, si hago mucho esfuerzo puedo ver el rostro de un muchacho de quizás veinte años, con ojos avellana y piel nívea escribiendo algo en un cuaderno, no sé qué estaba haciendo ni mucho menos quien es el, más bien quisiera recordar mi nombre ¿Me lo puedes decir?

He de creer que me he perdido en mi misma y en mis recuerdos, no puedo hacer nada y la verdad me cuesta mucho articular las palabras, la gente en las calles me observa con temor y siendo sincera no entiendo por qué. Cada noche regreso a la misma calle para dormir (No sé a qué otro lugar acudir) y observo como cada estrella brilla a su manera, me tranquiliza saber que al dormir no me pasara nada porque cada lucero está observándome, cuidándome… Nunca estamos realmente solos ¿No lo crees?

A veces, solo a veces veo fijamente a una casa de aspecto lúgubre que queda al final de la calle, el jardín(Si es que merece tal nombre) está muy descuidado, tanto así que no se puede observar  más abajo que el tercer piso de ese lugar quizás en su momento fue la casa más linda de este pueblo cuyo nombre no recuerdo y he de pensar que hay alguien allí; hace unas noches logre vislumbrar una mujer de piel pálida y cabello castaño claro observándome desde la ventana del tercer piso, era hermosa, su boca era una manzana y sus ojos eran de un amarillo gatuno, ella era un ángel malicioso ¿La viste también? ¿No? ¿Seguro?

También escucho melodías, dulces cantos a veces vienen a mi cabeza, cantos que hacen que me pierda en mi misma similar a los marineros que se pierden en la voz de las sirenas… No me gustan mucho porque me hacen perder la noción de la realidad y que piense que he podido recordar algo sobre mí. No creo estar tan mal, solo un poco desorientada ya que me he perdido ¿Me ayudas?

Un primero de octubre nací o quizás morí, seguiré vagando hasta encontrarme a mí misma o buscando ese rostro que sale en mis sueños o esperar a recordar quien fui o si realmente estoy viva por alguna razón  ¿Por qué me ves con miedo? No te hare daño, lo prometo, no soy así, solo tu rostro se me hizo conocido ¿De casualidad tu nombre no empieza por C…?