El deseo
de Caperucita:
La verdad
es relativa, dicen por ahí
Como se
ve en este cuento de característica infantil
¿El lobo
es malo o solo se fue cuando Caperucita lo deseaba más?
Muchas
veces somos presas del deseo
Buscamos
lo prohibido
Y
anhelamos lo imposible.
El lobo
de piel fuerte
Demonio
de ojos negros
Sonrisa
perfecta
Encontró
a quien sería su próxima presa.
Encontró
a la inocencia viva
A la
ternura de un ángel
Un ángel
de capa roja que lo llevo al cielo
A pesar
de que el, pudo haberla bajado hasta el mismísimo infierno.
Él le
enseño a desear probar la manzana prohibida
Él le
enseño a creer en la tentación
Y al
final el, quedo tentado por su dulce veneno.
Estaba
mal que se tentaran
El iba a
volver a su infierno personal
Además él
sabía
Que ella
jamás lo podría olvidar.
¿Cómo
ella pudo querer al lobo?
Un lobo
de sonrisa picara
Ojos que
irradiaban una sensual malicia
Quien
puede ser el rostro
Del
mismísimo demonio.
La
tentación en vida
Quien la
llevaría a probar
El peor
de los placeres de la vida.
Lobo
muéstrame tu fuerza
Muéstrame
tu bondad
Porque
todos aquí sabemos
Que si la
dejaste
Fue
porque la llegaste a amar.
Caperucita,
Caperucita
No vayas
a caer otra vez
Porque tú
no sabes cuando
El lobo
vuelve a renacer.
En un
hombre tal vez
Con la
misma descripción
Alto y de
piel morena
Con un
olor que embriague
Y ojos
fulminantes.
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